Santo Domingo.- El expresidente de Colombia, Iván Duque, calificó a República Dominicana como un faro de luz para la región, destacando su modelo de democracia, economía de mercado y la capacidad de trabajo de su población.
Al ser entrevistado en el podcast Líderes, producido y conducido por el exdiputado Orlando Jorge Villegas, exjefe de Estado, también destacó el “fuerte” sentido social y empresarial del presidente Luis Abinader, además de su apego irrestricto a las libertades económicas.
“República Dominicana es un país que hoy es un gran faro para la región, un faro de democracia, de inversión, de economía de mercado, de gente trabajadora y a la vez de gente feliz”, afirmó Duque.
Asimismo, el expresidente colombiano consideró que este país representa una inspiración para los líderes de América Latina, señalando que la democracia es un valor clave para la prosperidad de cualquier nación.
La democracia en América Latina
Consultado sobre la actual realidad latinoamericana, el exgobernante criticó a los políticos que, a su juicio, han manipulado el sistema democrático para mantenerse en el poder.
Asimismo, criticó duramente al Foro de São Paulo y al Grupo de Puebla, que a su juicio se presentan como movimientos progresistas, pero que han impulsado políticas “pobres” atacando a empresas, socavando la libertad de prensa y manipulando la justicia.
El expresidente sostuvo que actualmente existe una lucha fundamental en la región que enfrenta a demócratas contra autócratas, precisando que estos últimos buscan concentrar el poder y mantenerlo a través de reformas judiciales y cambios constitucionales, como en el caso de Nicaragua. Venezuela, Bolivia y Ecuador.
Manifestó que este tipo de reformas, que incluyen la reelección indefinida y el control del aparato judicial, son el “último clavo en el ataúd de la democracia”.
Duque criticó duramente las políticas económicas y fiscales de algunos gobiernos latinoamericanos de izquierda, asegurando que generan incertidumbre económica, inflación y devaluación de las monedas.
Destacó que este tipo de medidas destruyen la confianza del mercado y frenan el desarrollo económico, en lugar de promover un progreso genuino; En ese orden, defendió que sólo a través de una democracia sólida en todos los niveles se puede garantizar el crecimiento económico y el bienestar social.
Respecto a los cuestionamientos sobre la democracia, afirmó que no se debe tomar como un hecho y en ese sentido abogó por trabajar todos los días para enriquecerla y fortalecerla.
También rechazó la idea de que la insatisfacción con los sistemas democráticos se traduzca en su rechazo y consideró que es necesaria una crítica constructiva para que evolucionen y mejoren.
Conflictos en Gaza y Ucrania
Respecto a la guerra en Gaza, Duque reiteró su posición contra los conflictos bélicos, pero advirtió que, aunque condena la violencia, no se pueden justificar la agresión de Hamás ni la ideología que persigue la destrucción de Israel. Recordó que la solución de dos Estados, que ha sido un objetivo desde los Acuerdos de Oslo, sigue siendo el camino más viable para lograr la paz en la región.
Respecto a la guerra en Ucrania, Duque condenó las acciones de Vladimir Putin y afirmó que apoyar a Rusia en este conflicto sólo fomenta la expansión imperialista de Putin y pone en riesgo la estabilidad de Europa y el mundo. Por el contrario, criticó a quienes, sin mencionar la agresión rusa, se centran únicamente en las acciones de Israel en Gaza, lo que, en su opinión, refleja un doble rasero.
El papel de Estados Unidos hoy
Duque también analizó la geopolítica global, señalando que aunque Estados Unidos sigue siendo la principal potencia militar y económica del mundo, la creciente influencia de China en la economía mundial es cada vez más notable.
También destacó que figuras como Elon Musk, Sam Altman y Mark Zuckerberg están dominando el sector tecnológico a nivel global, estableciendo nuevas dinámicas en los mercados.
Respecto al futuro de Estados Unidos, advirtió sobre los peligros de la polarización política en este país, señalando que la división dentro de esta nación es favorable para los enemigos de la democracia a nivel mundial.
En ese orden, propuso que Estados Unidos trabaje en una política exterior bipartidista y bicameral respecto de los grandes temas globales.
“El bipartidismo y el bicameralismo en Estados Unidos tienen que ir de la mano en Medio Oriente, en Europa, en América Latina, en la transición energética y el tema climático y la inteligencia artificial”, señaló Duque durante la entrevista que otorgado al programa Líderes.