«Estas condiciones extremas y peligrosas no sólo complican enormemente la lucha contra los incendios actuales, sino que hacen mucho más probable que se produzcan nuevos focos», advierten los servicios meteorológicos estadounidenses, al menos hasta el miércoles.
“Situación especialmente peligrosa”
Los bomberos, 5.000 sólo en el incendio de Palisades en el oeste del país, dedicaron parte del día del 13 de enero a prepararse para la llegada de los vientos. Algunas tropas tomaron posiciones cerca de zonas de riesgo para intervenir rápidamente, mientras que otras limpiaron la maleza alrededor de los edificios en el camino de las llamas.
Así, se preparan para lo que los servicios meteorológicos describen como una “situación especialmente peligrosa”, su alerta máxima, que entra en vigor a las 4 de la mañana hora local del 14 de enero, en las zonas de Los Ángeles donde las rachas de viento superarán los 100 kilómetros por hora. hora. Hace menos de una semana, pero suficiente para inmovilizar aviones y helicópteros, reavivar las llamas de los incendios y, sobre todo, provocar otros nuevos.
Otro frente se abrió a primera hora de la tarde en Oxnard, a unos 50 kilómetros al norte de Los Ángeles. El incendio recibió el sobrenombre de “Auto Fire” debido a la gran cantidad de concesionarios de automóviles en la zona.
“Vamos a seguir utilizando todos los medios a nuestro alcance para combatir los incendios”, prometió al mediodía el presidente saliente, Joe Biden. Los vientos cálidos y secos que se esperan serán “cercanos a la fuerza de un huracán”, dijo la alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass.
Aumenta el número de muertos
Asediada por las llamas desde el pasado martes, la segunda ciudad más poblada de Estados Unidos cuenta sus muertos día a día: el número de víctimas mortales aumentó el domingo a 24, según las autoridades locales. En los barrios devastados, los equipos de rescate, ayudados por perros, continúan buscando cadáveres entre los escombros.
“Aún estamos en la región de Altadena y este es el tercer día de búsqueda. Es una tarea muy difícil y, lamentablemente, todos los días nos topamos con restos de miembros de la comunidad”, explicó el sheriff del condado de Los Ángeles, Robert Luna.
Sin embargo, el esfuerzo de miles de bomberos, incluidos los del vecino México, han contenido parcialmente los dos principales incendios de los últimos días. Y los bomberos sobre el terreno han recibido refuerzos humanos y materiales, incluidas decenas de camiones cisterna, y están preparados para afrontar la situación, han asegurado varios de sus responsables.
Los bomberos advirtieron que el regreso de los evacuados se suspendería hasta el jueves debido a que el viento estaba recuperando fuerza, y pidieron paciencia a las decenas de miles de residentes que hacen cola, a veces durante horas, con la esperanza de recuperar medicamentos o ropa de sus familias. casas, o simplemente para ver si sus casas han sido destruidas o no.
Joe Biden dijo el lunes que se necesitarán “decenas de miles de millones de dólares” para reconstruir Los Ángeles.
