Santo Domingo .- La transición energética viene acompañada de grandes retos, como la necesidad de mantener la estabilidad de la red eléctrica ante la intermitencia de las energías renovables, así como la urgente necesidad de almacenamiento eficiente y mejoras en las infraestructuras.
El ministro de Energía y Minas, Joel Santos Echavarría, estimó que la transición a una red predominantemente renovable requiere una inversión aproximada de 5.400 millones de dólares.
Ante este desafío, el Gobierno dominicano está interesado en explorar el enfoque del Acelerador de Transición Energética, que busca catalizar capital a través de soluciones innovadoras, especialmente en un contexto de condiciones financieras y fiscales restrictivas.
Dijo que este programa podría proporcionar acceso a mercados de carbono de alta integridad, lo que facilitaría la financiación de la transición energética.
Destacó la importancia de la cooperación internacional y el intercambio de conocimientos para maximizar las oportunidades de creación de capacidad y promover el desarrollo sostenible.